Trastorno o Pompeyo lo hizo de nuevo.

Un piano, y sobre él un busto paterno que será máscara, un espejo, dos pequeños muñecos, un cajón y una luz siempre tenue son los únicos elementos escenográficos que necesitaron Pompeyo Audivert y Andrés Mangone para crear un mundo familiar afectado por la hipocresía, la mentira, el ejercicio del poder y el odio de clase que fue, y sigue siendo, uno de los rasgos constitutivos de las clases dominantes en esta parte del planeta.

Para quien no ha visto nunca la teatralidad de Pompeyo, sostén de la dramaturgia rioplatense, Trastorno será tal vez la mejor manera de iniciar el vínculo con uno de los directores más personales del teatro nacional.

Y para quienes han podido acceder a sus trabajos anteriores, esta pieza será reveladora, una vez más, de sus preocupaciones y de su compromiso político y estético.

La propuesta tiene varios hallazgos: la sutil y potente composición del propio Audivert en el personaje de Rosario, una madre viuda, desquiciada y siniestra de la oligarquía vernácula que encarna el cinismo y el ocultamiento que recorre toda la trama; el fantasma de Nietzsche que sobrevuela en varios pasajes de la obra al reflexionar sobre la verdad y sobre Dios; el humor, la tragedia y la intriga que conviven de manera armoniosa y porque no, la convicción de impunidad que siempre rodea al poder.

Una notable y aguda observación, alejada de todo maniqueísmo, resulta en cómo se reproducen abajo las conductas y subjetividades de arriba, y esto se teatraliza de manera notable en el trabajo corporal y en la voz de Julieta Carrera como Titi, la criada genuflexa y cómplice.

En un clima de intriga que se sostiene desde el inicio hasta el final, con un registro estético neogrotesco alejado del realismo pero que alude literalmente a la historia y a la realidad circundante, Trastorno es otro acierto en la programación del Centro Cultural de la Cooperación y una muestra acabada del mejor teatro popular de calidad que tiene mucho para decirnos en estos tiempos de deriva. Yo que vos…

Trastorno, un culebrón metafísico. Versión libre de “El Pasado” de Florencio Sánchez

Elenco: Pompeyo Audivert, Juan Manuel Correa, Pablo Díaz, Ivana Zacharski, Fernando Khabie, Julieta Carrera, Fernando Naval

Dirección: Pompeyo Audivert y Andrés Mangone

Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini,

Av. Corrientes 1543. CABA

Viernes y Sábados a las 20 hs.

Jorge Nicosia

El Rescate – Jueves a las 20 hs.

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